¿Cómo puedo ayudar a mis hijos a hacer las tareas?

Está demostrado que los niños tienen mayor éxito escolar cuando los padres nos interesamos de forma activa por sus deberes y tareas escolares; ya que de esta forma les demostramos a nuestros hijos que lo que hacen o aprenden en la escuela es importante y se debe reforzar.

Sin embargo, ayudar con las tareas y deberes escolares no significa que debemos pasar horas agachados sobre un escritorio o que debamos sentarnos junto a nuestros hijos toda la tarde o noche solo observándolos. Nosotros podemos ayudar a nuestros hijos enseñándoles habilidades de organización y de estudio, explicándoles cuando tengan dificultades o animándoles a que se tomen un descanso cuando lleven un cierto tiempo trabajando en las tareas escolares.

A continuación, diez consejos para poder guiarnos:

  1. Conozca a los profesores de su hijo y cuáles son sus objetivos. Asista a las reuniones escolares, como las de padres y profesores, para conocer mejor a los profesores de su hijo. Pregúnteles acerca de lo que esperan de los deberes y sobre cómo debería implicarse usted.
  2. Establezca un área adecuada para hacer las tareas. Asegúrese de que el niño dispone de un lugar bien iluminado para hacer los deberes y de que tiene a mano el material escolar necesario (papel, lápices, pegamento, tijeras…).
  3. Establezca un horario regular para estudiar y hacer las tareas. Algunos niños trabajan mejor por la tarde, después de merendar y de un período de juego, mientras que otros prefieren esperar a después de la cena.
  4. Ayúdele a diseñar un plan de trabajo. En los días en que tenga un volumen importante de tareas o cuando tenga que iniciar una tarea escolar especialmente complicada o pesada, anime a su hijo a dividirla en partes más manejables.
  5. Reduzca al mínimo las distracciones. Esto abarca la televisión, la música alta, las redes sociales y las llamadas de teléfono.
  6. Asegúrese de que su hijo hace su propio trabajo. No aprenderá nada si no piensa por sí mismo y comete sus propios errores. Los padres pueden hacer sugerencias y dar indicaciones para orientar a sus hijos. Pero el aprendizaje debe estar en manos de los niños.
  7. Motive y supervise a su hijo. Pregunte a su hijo sobre las tareas escolares, los controles y los exámenes. Apóyelo, revise que ha completado las tareas y trasmítale el mensaje de que puede acudir a usted cuando tenga preguntas o haya algo que le preocupe.
  8. Dele un buen ejemplo. ¿Le ve su hijo organizando bien el tiempo o leyendo libros? Los niños son más propensos a seguir el ejemplo de sus padres que sus consejos.
  9. Elogie su trabajo y su esfuerzo. Cuelgue en la refrigeradora un examen o trabajo artístico donde sacó un sobresaliente. Comente sus logros académicos a sus parientes.
  10. Si su hijo tiene constantemente problemas con las tareas escolares, pida ayuda. Hable al respecto con su profesor. Hay niños que tienen problemas para ver bien la pizarra y necesitan utilizar anteojos; otros pueden necesitar que los evalúen por tener problemas de aprendizaje o un trastorno por déficit de atención.

Créditos:
Departamento de Orientación